domingo, 6 de marzo de 2011

267- Un muchacho como "él" (Crónica personalísima del multitudinario recital 2011 de Palito Ortega en Mar del Plata)

(Dedicado a mi querida lectora Susana B.)

Nuestras vacaciones marplatenses en enero tienen generalmente un plus, una yapa bastante singular. Se trata de nuestra ex compañera de universidad y amiga Ana (y su encantadora familia).
Ana, que vive en La Lucila durante once meses, lleva aquí una actividad social intensísima, que hace que nos veamos a lo sumo dos o tres veces durante el año y recurramos al teléfono para sabernos vivas mutuamente. Lo cual es una pena porque solemos pasarlo muy bien cuando estamos juntas.

Pero en Mar del Plata ¡somos vecinas! Y eso se traduce en su voluntad inquebrantablemente compensatoria de vernos lo más posible.

Los Cayian somos más tranquilos y nos cuesta socializar tanto en vacaciones, pero nuestra amiga es insistente y pertinaz y sus invitaciones (a las que es casi imposible negarse) van desde mate y carioca en Playa Grande hasta té con masas en la Boston. Para colmo, cumple años en enero, por lo que la mitad de nuestros días veraniegos se nutren de Ana y su presencia. Hecho que redunda en añorarla los otros once meses del año en que hace mutis por el Norte.

¿Cómo explicar un vendaval? Locuaz, amena, un tanto dogmática en su forma de ver la vida, temperamental y categórica, pero dispuesta siempre a ayudar si hace falta, Ana es irremplazable. Sabe de todo y es mi asesora de elegancia especial en eventos y paño de lágrimas en algunas cuitas. Pero es, además, mi única cómplice en una debilidad casi inconfesable que nos une en una hermandad, que ríanse los Rosacruces. ¡Ambas somos fanáticas de “El Rey”! ¡De Don Juan Carlos de Borbón no, amigos! Se trata nada más y nada menos que del único rey que se conoce por esta banda del Plata, del mismísimo Ramón Bautista Ortega (“Palito” Ortega) “El Rey”.

Resulta que Daniel Scioli, el Gobernador de la Provincia de Buenos Aires, encabeza este verano una serie de recitales gratuitos que se realizan en el Paseo Hermitage de Mar del Plata, justito debajo de nuestro departamento. Es imposible describir la cantidad de gente que convocan esos recitales. Con decirles que han llegado a provocar cuantiosas pérdidas en las arcas de los productores teatrales ya que los días de recital, al teatro va muy poca gente. Y entre los protagonistas (actuaron Julio Iglesias, el Dúo Pimpinela, el Puma Rodríguez, el Chaqueño Palavecino y muchos más) un sábado de enero se anunció a nuestro ídolo adolescente, razón por la cual debí soportar la insistencia de Ana para asistir juntas al evento.

“El que persigue, consigue” y si algo tiene nuestra amiga es su persistente insistencia razón por la cual el sábado consabido a eso de las siete de la tarde bajé (sola, Cayian vino más tarde) a las barrancas de la playa Las Toscas y me instalé como pude con mis dos sillitas playeras en la pendiente parquizada frente al escenario. Y cuando digo pendiente, es pendiente. Todo muy lindo pero quedábamos como para jugar a la resbalosa ya que ninguna sillita podía ubicarse con sus patas en forma horizontal y uno debía equilibrar la situación arqueando la espalda hacia atrás. El recital comenzaría a las nueve de la noche con lo que la situación amenazaba tener ribetes traumatológicos.

Para atemperar la espera hizo su aparición una pareja coetánea de El Rey. “La Viole” y Néstor Fabián. O Violeta Rivas (una cantante de la Nueva Ola de los años sesenta) y su esposo, tanguero de ley aunque un tanto apachurrado por los años. De Ana: ni noticias. Esta servidora, a merced de los vientos marinos nocturnos y tratando de no terminar cuesta abajo en la rodada para hacer juego con algún tanguito de Fabián, la esperaba sin que ella diera la más mínima señal de vida.

A todo esto la gente ya cubría las barrancas y el llano en una distancia que iba desde la explanada del Provincial hasta el Torreón del Monje. Gentegentegente. Humanidad veraniega en el más auténtico y argentino estilo. Sillitas, termos, mates y factura, risas, la nona envuelta en la lonita de la playa para no “agarrar frío”, el nene clamando por uno de los globitos naranja que los partidarios de Scioli distribuían barranca abajo el papá que trataba de persuadir sin acogotar , contando, con toda seguridad, cuántos días de tortura veraniega le faltaban antes de regresar a su lugar de descanso: la oficina.

Fabián había terminado de cantar y trataba de hacer bromas fallidas sobre su mujer (que en realidad estaba preciosa para su edad, con un vestido que ya quisiéramos sus coetáneas poder ponérnoslo) y de la susodicha Ana: ni rastros. Cayian ya había tomado ubicación en el césped luego de rastrearme por celular entre la multitud y de cubrirme con un chal por el que yo le había implorado (hacía tanto frío que le hubiera robado la lonita a cualquiera de las nonas con tal de descongelarme).

Estaba por comenzar el show principal cuando hicieron su aparición en simultánea nuestra amiga con su hija Male (una valiente, si las hay) y, en el escenario, un conductor muy estimado por gran parte de los argentinos. Juan Alberto Mateico, “el muñeco“.

El gentío estalló en aplausos y nosotras empezamos a deslizarnos por la cuesta hasta detenernos a cinco milímetros de la siguiente familia argentina ubicada a nuestros pies (por suerte no estaba conformada por ninguna abuela envuelta en lona).
“El Rey” apareció como la niña negra de un poema que se recitaba en mi infancia “Todo vestido de blanco, almidonado y compuesto…” albo, níveo, del cuello hasta los pies. Inmaculado. Flaquísimo. Seguía siendo, con cuarenta años más que cuando nos hiciera bailar a toda hora, la contrafigura sutil del desaparecido Sandro, puro fuego y pelvis.

Y comenzó el show, multiplicado en tres pantallas gigantescas. Y aumentó el viento. Mucho. Muchísimo. Ana y yo subimos las capuchas de nuestras camperas (chaquetas para los hispanos) y lo único
que se nos veía eran la nariz y los anteojos enmarcados en el frunce de las caperuzas. Más horribles no podíamos estar, pero había que soportar el viento. Y disfrutar del repertorio de Palito.
Viva la vida, Un muchacho como yo, La felicidad …jajá jajá yeahhhh! Nos sacudíamos y bailábamos como a los quince sin pensar en nuestros huesos en el amanecer del día siguiente. Y como nosotras, todas y todos los sesentones y cincuentones que nos rodeaban. Pero lo mágico es que también lo hacían los chicos y los abuelos. El sortilegio de Palito seguía intacto en el publico.

“Yo tengo fe“, decía Ramón Bautista Ortega, el “changuito cañero” tucumano que había triunfado en Buenos Aires, y todos lo coreábamos emocionados.

Hubo twist, batería, un homenaje a Sandro y hasta un diálogo con Elvis… La gente deliraba. Y nosotras estábamos tan emocionadas que ni siquiera nos importaba el papelón que estábamos haciendo.

Ana, master de elegancia y savoir faire, con la capucha apretadísima, sentada en la sillita playera junto a mí, las piernas envueltas en mi chalina, aplaudía y gritaba otra, otra , bravo, y yo la secundaba. Menos mal que no nos filmaron. Porque creo que más de una de sus amigas, si viera el testimonio fílmico, optaría por un liso y llano corte de relaciones.

Pero, pensándolo bien. ¡Qué maravilla que sexagenarias todavía tengamos ganas de sandunguero juvenil al compás de la música de nuestro ídolo! Nuestro ídolo que ha sabido de éxitos y fracasos, de caídas y retornos. Que de cortar caña en el monte tucumano llegó a ser Gobernador de su provincia, que lloró errores y asumió pecados políticos, pero que, a pesar de todo, sigue siendo querido por su pueblo. Nuestro ídolo, que sabe ser amigo de sus amigos más allá de toda dificultad, como acaba de demostrar con la contención y el apoyo que le dedicara a su colega Charlie García, o con el eterno recuerdo del jockey Ireneo Leguizamo, por ejemplo.

Las luces de los departamentos a nuestras espaldas se encendían y apagaban al compás de la música, el Gobernador entregaba plaquetas recordatorias, estallaban los fuegos artificiales llevando a la mayoría de los presentes al paroxismo.

Salvo Cayian. A él nunca le gustó mucho Palito. Y las monarquías vernáculas por lo menos no son de su agrado. Y mucho menos el contemplar a su esposa en actitud tan distante de su realidad etaria. Como es muy educado y me quiere, mantuvo a lo largo del recital una sonrisita complaciente de medio lado que hubiera hecho las delicias de su suegro (era la misma que papá usaba cuando mi mamá lo superaba).

En cuanto a Male, no daba crédito a sus ojos. Le debía resultar increíble que dos señoras grandes disfrutaran como locas con un septuagenario que se contoneaba en el escenario de Las Toscas.
Pero espero que si dentro de muchos, muchos años le toca asistir a mis exequias, relate a los allí presentes los detalles de esa noche tan especial, tan “para siempre” al compás de “El Rey” y su inolvidable repertorio”.

Cati Cobas

Palito Ortega (Wikipedia)

(n. Lules, Tucumán, Argentina, 28 de febrero de 1941-) es el seudónimo de Ramón Bautista Ortega, actor, cantante, político, productor y director de cine argentino.

Nacido en un hogar humilde, desde su juventud desempeñó diversas labores para colaborar con su numerosa familia. Desde la década de 1960 integró el grupo musical El Club del Clan, que tuvo una relevante repercusión y se mantuvo durante varios años.

En su trayectoria de más de cinco décadas, ha filmado 33 películas, de las cuales se destacan Mi primera novia (1966),La sonrisa de mamá (1972), El tío Disparate (1978) y ¡Que linda es mi familia! (1980), entre otras. Como cantante, se lució con sus interpretaciones de «La felicidad» y «Despeinada».

Entre 1991 y 1995 se desempeñó como Gobernador de Tucumán y entre 1998 y 2000 fue Senador por la misma provincia. En la actualidad, continúa presentándose por diversos escenarios brindando conciertos.

Contenido

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[editar]Biografía

[editar]Infancia y juventud

Acceso a la ciudad de Lules.

Ramón Bautista Ortega, tal su verdadero nombre, nació en el ingenio Mercedes, de la ciudad de Lules, en la provincia de Tucumán, el 28 de febrero de 1941. Sin embargo, su fecha de nacimiento fue registrada por sus padres recién el 8 de marzo del mismo año, por lo que es común que figure como su día natal.

Hijo del obrero azucarero Juan Ortega y de Nélida Rosario Saavedra, fue el segundo de siete hermanos (cinco varones y dos mujeres). Ramón comenzó a trabajar a los cinco años como lustrador de zapatos para ganar dinero y ayudar a su numerosa familia.

Luego debió abandonar sus estudios primarios, pero finalmente retornó a ellos con una maestra que les ofrecía clases durante las noches. En 1954, cuando contaba con 13 años, sus padres se separaron y su madre abandonó a la familia, quedando los hijos a cargo de su padre. Durante toda su niñez realizó múltiples trabajos como reparador de bicicletas y vendedor de periódicos, cubanitos (masas típicas de Argentina rellenas con dulce de leche) y cotorras (especies de aves similares a un loro pero más pequeñas).

[editar]Traslado a Buenos Aires y primeros trabajos

En 1955, con tan solo 14 años, decidió trasladarse a la ciudad de Buenos Aires junto a un amigo para buscar trabajo. A pesar de que en su primer día residió en Plaza Retiro, después llevó a cabo diversas funciones como ser camarero, cadete, limpiador y vendedor de café. En Parque Retiro ofreció sus primeras actuaciones como imitador del popular cantante Elvis Presley, durante un festival.

Finalmente, mientras se desempeñaba como vendedor de café, ingresó con este mismo trabajo a Canal 7 y Radio Belgrano hasta que Juan Carlos Ginés lo convocó para ser su ayudante. En 1957, en la ya mencionada emisora, conoció a Dino Ramos y Silvio Soldán (que participaban en la orquesta de Carlinhos), a quienes acompañó durante tres años en esta banda. En ese lapso de tiempo aprendió a ejecutar la batería y la guitarra con el músico Tito Cava.

También colaboró en la composición de las canciones de Ramos, y en una de las giras de Carlinhos llegó a la provincia de Mendoza, donde actuó en un club nocturno. Con el seudónimo de Nery Nelson interpretó temas folclóricos en Radio Cuyo por tres meses. Posteriormente grabó dos discos con el sello Azteca, con temas como «La edad del amor», «No te enojes nena», «Mira el arco iris» y «Cupido».

Tras modificar su nombre artístico por el de Tony Varano, trató de formar un grupo musical, viajó a Chile integrando un circo y reemplazó a un vocalista del grupo musical The Lyons, en donde no tuvo demasiado éxito ya que no sabía el idioma inglés y se le dificultaba interpretar las canciones.

Luego de ser rechazado por la compañía discográfica Odeón, se dirigió a la grabadora Discofonía, donde grabó un disco simple con dos canciones: «Ya no quiero» y «La locura».

[editar]Su labor en la RCA Víctor y debut televisivo

En 1962 se presentó en la empresa RCA Víctor y cantó el tema «Sacate la careta» (compuesto por él) ante el directivo Ricardo Mejía, quien lo convocó como compositor. Esta canción fue interpretada por Johnny Tedesco pero poco después, tras entonar veinte temas musicales junto a Víctor Buchino, Ortega hizo un disco simple que contenía tonadas como «María» y «Escalofrío».

El propio Mejía, a quien no le agradaba el apelativo Nery Nelson, lo renombró a Palito Ortega por su contextura delgada. Luego, le presentó al periodista Leo Vanés, quien fue su agente de prensa en sus comienzos con el objetivo de orientar su carrera artística. Con la orquesta de Oscar Toscano, en mayo de 1962 grabó otro disco en donde presentó «Burlado» y «Dejala, dejala», con la colaboración de Dino Ramos.

Tras debutar en televisión en La cantina de la guardia nueva, por Canal 11 a principios de la década de 1960, su hermana Rosario murió atropellada por un automóvil a los 11 años. El hecho deprimió mucho a Ortega, por lo que sus presentaciones con temas alegres contradecían su imagen sobria. Desde aquel entonces, se le atribuyó el apelativo El chico triste de las canciones alegres.

[editar]Ingreso al Club del Clan y consagración

A fines de 1962 fue integrado al Club del Clan, transmitido por Canal 13, en donde su canción más popular fue «Despeinada», de Chico Novarro. Por su parte, Ortega introducía a su repertorio temas como «Bienvenido amor», «Media novia», «La felicidad» y «Camelia».

Para 1963 los integrantes del grupo más populares eran Palito Ortega y Violeta Rivas, quienes recibían importantes sumas de dinero. Luego, ellos junto a Johnny Tedesco, Chico Novarro, Lalo Fransen y Nicky Jones se trasladaron a Canal 9, dirigido por Alejandro Romay, para encabezar el ciclo Sábados continuados con la conducción de Antonio Carrizo.1

Palito Ortega, Jolly Land, Violeta Rivas y Johnny Tedesco en El Club del Clan.

El programa transmitido en varios países de América Latina llegó a alcanzar 55,3 puntos de audiencia en 1963; por su parte, Canal 7 impuso otro ciclo similar titulado Ídolos de la juventud. En esta década, Palito Ortega figuró en múltiples revistas de interés general y mantuvo un romance con la actriz Marta González a lo largo de 1964. El 12 de marzo de aquel año se estrenó El Club del Clan, película dirigida por Enrique Carreras con la participación de Alfredo Barbieri yBeatríz Bonnet.

Tras presentarse en el club Bohemios de la Boca, en 1964 realizó su primera gira internacional a México, donde grabó un long play; luego viajó a Estados Unidos, donde conoció a Paul Anka; y finalmente, hizo giras por París, Madrid,Londres y Montevideo. El grupo se disolvió definitivamente en 1965, cuando ya era muy aceptada la banda inglesa Los Beatles.

Después, les dedicó a sus seguidores un libro de poemas llamado Simplemente extraño y se relacionó laboralmente con María Elena Walsh con el fin de componer temas infantiles y recopilarlos en un disco simple, el cual fue presentado en 1965 con melodías como «Canción del Jacarandá». En 1966 protagonizó la obra teatralUna extraña pareja, de Neil Simon y estrenada en el Teatro Astral con Rodolfo Bebán.

De sus otros discos se destacan: «Estar enamorado», «Sabor a nada», «Dicí por qué no querés», «Sin timón», «Todo es amor», «El changuito cañero», «Vestida de novia», «Me permite», «Papeles», «Qué lindo», «Calor», «Mi tierra», entre otros. Sobre el éxito que tenía Ortega en aquellos años, Ricardo Mejía expresó: «Palito no trataba de imitar a nadie, su rock era original y nacional, yo creo que su gran éxito fue justamente que era original y como yo no era argentino pude verlo con mayor claridad y objetividad.»

[editar]Actuaciones cinematográficas

Los primeros filmes encabezados por Ortega se estrenaron paralelamente a la edición de sus discos. Inicialmente estas producciones fueron realizadas como una prolongación de su éxito musical, es decir, un método de llevar al cine sus más relevantes temas musicales

A pesar de que ya había trabajado como extra en 1958, su siguiente participación cinematográfica en el cine fue en 1963 cuando, contratado por Enrique Carreras, filmóUn viaje al más allá, donde interpretó «Despeinada». En 1964 fue el protagonista de El Club del Clan, donde la trama indicaba que él junto a otros compañeros y un productor teatral deseaban destacarse en el espectáculo presentándose con su compañía en diversos sitios.

Basada en una novela de Alfonso Paso, en 1965 co protagonizó junto a Violeta Rivas Fiebre de primavera interpretando a un estudiante. Continuamente realizaba recitales, discos, obras teatrales y presentaciones en televisión. En 1966 rodó la película Mi primera novia, una adaptación de la película Adolescencia (1942), conÁngel Magaña y Mirtha Legrand. Durante la grabación, conoció a la joven actriz Evangelina Salazar, que se había destacado en televisión con Jacinta Pichimahuida. Al momento de su estreno la relación entre ambos ya estaba consolidada. En 1966 ganó el Festival de la Canción en Piriápolis, con el tema «Convivir» y logró más de 50 premios internacionales, incluyendo el de compositor en el Midem de Cannes de 1968.

En febrero de 1967 hizo una gira por todo el país y a su regreso rodó una serie de películas como Un muchacho como yo (1968), donde encarnó a Raúl Sierra; ¡Viva la vida! (1969), con Mercedes Carreras; Los muchachos de mi barrio (1970), con guiones de Norberto Aroldi; La familia hippie (1971), con cuadros musicales; entre otras. En Londres filmó ¿Quiere casarse conmigo?, con la española Sonia Bruno, y en España rodó Amor en el aire, dirigida por Luis César Amadori.

En 1972 actuó junto a Libertad Lamarque (quien no trabajaba en el cine argentino desde 1947) en La sonrisa de mamá, filme del cual ambos compaginaron un tema con el mismo nombre y el cual es muy evocado en "El día de la madre". También formaron parte del elenco Nelly Beltrán, Irma Córdoba, Adriana Aguirre y Jacques Arndt.

Muchas de sus producciones cinematográficas llevaban el nombre de sus canciones, tal es así ¡Viva la vida! o Un muchacho como yo. Luego de estrenar varias comedias entre 1973 y 1975, al año siguiente debutó como director con la película Dos locos en el aire, con Carlitos Balá (quien trabajó en siete filmes de Palito). Bajo el auspicio de Chango Film Producciones, el argumento relataba las aventuras de un oficial de la Aeronáutica (Balá), que siempre provocaba conflictos, y éstos eran apañados por su instructor de vuelo (Ortega) que los tolera debido a la amistad de muchos años que ambos tienen.

El periodista Jorge Mercanti entrevistando a Palito Ortega en Misiones. A fines de la década de 1970, ya instaurada la dictadura militar, hizo otras dos películas de relevante éxito: Brigada en acción, con Juan Carlos Altavista y Blanca del Prado; y El tío Disparate, con Iris Láinez y Las Trillizas de Oro. En 1979 convocó a Luis Sandrini para que participara en una película suya con Evangelina Salazar, Jorge Mayorano y Alicia Zanca: Vivir con alegría, propuesta que el legendario actor aceptó a pesar de sus serios problemas para movilizarse debido a una hemiplejía que había padecido en 1978. El éxito de la película motivó a que se produjese otra, la cual se tituló La familia está de fiesta, que incluía en el elenco a Niní Marshall. El último día de filmación, tras tomarse algunas fotografías, Sandrini sufrió un colapso vascular y se desmayó repentinamente, por lo que debió ser internado y falleció dos semanas después a los 75 años. El deceso del actor fue el motivo por el cual se cambió el título de la película a ¡Qué linda es mi familia! y se dedicó ésta a su memoria. El propio Ortega expresó: «Decidí cambiarle el nombre porque consideré que ya "la familia no está de fiesta". Me pareció algo lógico y así lo hice.»

En total fueron siete los filmes en los que incursionó como director y nueve las que hizo como productor. Ya en uno de sus últimos proyectos, Cosa de locos (1981), le encargó la dirección a Enrique Dawi.

[editar]Vida familiar: Casamiento y familia

El lunes 27 de febrero de 1967, Ortega y Salazar tras un breve noviazgo, se casaron por civil en un Registro de la calle Arcos al 1900. Oscar Sanders y Hugo Stabile (testigos del civil), secretario y representante del cantor, se encargaron de la organización de la guardia policial en el momento de la llegada de ambos. El momento fue presenciado por aproximadamente 2.000 personas. Ortega y Evangelina llegaron en un vehículo conducido por Antonio Andó (tío de ella), y los casó el escribano Joaquín Alonso.

El 3 de marzo de aquel año a las 21.30 h, en la Abadía de San Benito de Buenos Aires, sobre la calle Villanueva 905. Los padrinos de boda fueron Irineo Leguizamo y Lolita Domínguez (por parte de Ramón) y Antonio Andó y su esposa (por parte de Evangelina). El casamiento fue transmitido en vivo por Canal 13 con la animación deNicolás Pipo Mancera y Antonio Carrizo. La fiesta se llevó a cabo de forma íntima y privada en la sede del Tiro Federal y al día siguiente viajaron a su luna de miel enMéxico. Al regresar, ambos se instalaron en un departamento de Avenida del Libertador, en Capital Federal.

Evangelina abandonó prácticamente su carrera artística en 1979 para dedicarse a la crianza de sus hijos y el mantenimiento de su vivienda. Ortega tuvo seis hijos: Martín, Julieta, Sebastián, Luis (nombre que le designó en honor a Luis Sandrini, ya que nació una semana después de su fallecimiento), Emanuel y Rosario.

A pesar de que algunos de sus hermanos habían muerto en su juventud, aún frecuentaba a su padre y demás hermanos: Luis, Juan, Jorge y Raúl. En 1996 Luis Ortega, quien se desempeñaba como Intendente de General Sarmiento, murió en un accidente automovilístico y su cuñada Cristina Lemercier se suicidó tras una discución con su esposo (hermano de Ortega). También es tío de las actrices Camila y Luciana Salazar, tiene varios nietos y sus suegros fueron Rosa Gloria Romano y Manuel Salazar.

[editar]La llegada de Frank Sinatra a la Argentina

Frank Sinatra en 1973.

Ortega luego compró oficinas, se relacionó laboralmente con Chango Producciones, contrató empleados, tuvo su propia editorial musical y continuamente realizaba producciones discográficas. Posteriormente Ricardo Finkel le propuso participar en la licitación que había ideado la empresa Sinatra Enterprise para los empresarios argentinos.

En diciembre de 1980 se contactó con el abogado de Frank Sinatra, Edwin Peristein, con quien acordó una reunión para debatir la posibilidad de que arribase a Argentina el popular cantante estadounidense. El 11 de febrero de 1981, en el Caesars Palace de Lake Taone, Nevada, se firmó el contrato en el cual se estrablecía el montaje de seis presentaciones de Sinatra durante la primera quincena de agosto de 1981 en el Sheraton Hotel con cena-show y en el Teatro Luna Park a precios populares. Para el 14 de febrero la noticia era promocionada por todos los medios gráficos argentinos.

El hecho fue criticado por todos los sectores sociales y políticos, quienes consideraban que Palito Ortega concretaba la llegada de Sinatra con el objetivo de "acomodarse" con el gobierno de turno, encabezado por el militar Roberto Eduardo Viola y además consideraban que el país no estaba en condiciones de traer a un cantante extranjero como Frank Sinatra ya que implicaba una inversiónde mucho dinero. Con respecto a ello, Ortega expresaba que el dinero lo otorgaba únicamente el y que el gobierno nunca dio capital para concretarlo.

Sin embargo, los grandes problemas económicos que atravesaba Argentina por aquel entonces con una relevante deuda externa y un incremento considerable en el precio del dólar, dificultaron la llegada del cantante, que finalmente se concretó el 2 de agosto de 1981, cuando llegó acompañado de su esposa en el vuelo 213 de la línea South African Airways. El 12 de agosto se retiró, viajando a San Pablo (Brasil) desde el aeropuerto Jorge Newbery.

La decisión de traer a Frank Sinatra a Buenos Aires le provocó una gran cantidad de deudas a Ortega, quien se demoró cinco años en pagarlas. Para ello debió rematar varios imbuebles, terrenos y demás bienes, además de hacer espectáculos por todo el país.

[editar]Traslado a Miami y producción de programas

En 1985, viajó a Estados Unidos y mantuvo uan reunión con el cubano Carlos Barba, jefe de programación del área latina de la cadena Telemundo, a quien le agradó la propuesta de trabajo de Ortega y lo contrató inicialmente por un año con el objetivo de producir con programa de televisión de una hora semanal con entrevistas a artistas latinos residentes en Miami, como Julio Iglesias o José Luis Rodríguez.

El ciclo se mantuvo durante cinco años, pero con cierta anterioridad se había disminuido la duración del programa que era transmitido por el Canal 47 de Estados Unidos. Ahí también colaboraba su hijo mayor, Martín Ortega.

A su vez, editó los long-play Soy latinoamericano y De fiesta, con su respectivo video. También fue uno de los fundadores de Sadaic Latin Corp, empresa subsidiaria de Sadaic Argentina, dedicada a la supervisión de la recaudación por parte de las empresas de los derechos autorales de los artistas argentinos que trabajaban en Miami.

[editar]Regreso a la Argentina y carrera política

Después de su regreso de Estados Unidos, comenzó su carrera política como aliado de Carlos Menem. Fue elegido gobernador de su provincia natal, Tucumán (de1991 a 1995). Su desempeño como gobernador respondió a una estrategia diseñada por el presidente Menem de convocar a personalidades sin antecedentes políticos previos, pero con gran popularidad como consecuencia de las actividades en otros ámbitos.

De esa forma, Ramón Baustista Ortega en Tucumán, y el ex-piloto de Fórmula 1 Carlos Reutemann en Santa Fe, fueron candidatos por el Partido Justicialista para presidir sus provincias. Ortega también debía enfrentar a Antonio Bussi, político que amenazaba con desplazar la hegemonía del Peronismo en Tucumán desde el regreso a la democracia en 1983 con la asunción de Raúl Alfonsín.

Ramón Ortega triunfó en las elecciones de 1991, cuyos resultados fueron impugnados por Antonio Domingo Bussi. Sin embargo el triunfo de Ortega fue reconocido por la justicia, comenzando una etapa de gobierno en sintonía con las políticas privatizadoras del mandatario presente. Así se privatizaron el Banco de la Provincia de Tucumán, la Dirección Provincial del Agua (DIPOS) que tenía a su cargo el servicio de agua potable y cloacas.

La concentración de poder que el propio Bussi había diseñado en la constitución de 1990, paradójicamente fue funcional al gobierno de Ortega. Uno de los escándalos que más repercutieron durante su trabajo fue la denuncia de espionaje policial a dirigentes estudiantiles universitarios opositores en 1993, hecho que adquiriría resonancia nacional.

Fue electo Senador por Tucumán entre 1995 a 2000 y en 1999 fue candidato a la Vicepresidencia de la Nación acompañando a Eduardo Duhalde por el Partido Justicialista y la Unión de Centro Democrático. En 2010, a diez años de haber abandonado la política, apoyó la campaña electoral de Alfredo Olmedo, candidato aGobernador por Salta.

[editar]Actualidad

En 2002 recibió, junto a Chico Novarro, un premio Martín Fierro por la composición de la banda de sonido del programa televisivo El sodero de mi vida. En 2004presentó su nuevo CD «Pasado y presente», y en conmemoración de los 200 episodios de Los Roldán, fue un invitado especial en la serie. A pesar de que su popularidad ha disminuido en las últimas décadas, continúa con sus giras por todo el país.

En 2007 cantó en una fiesta íntima de la Cámara Argentina de Salas de Bingo y Afines (Casba), que se realizó en el salón Golden de Parque Norte. En 2008 colaboró con la recuperación médica de su amigo Charly García, quien residió en la estancia de Ortega. En 2009 recibió un homenaje en el ciclo televisivo de Susana Giménez, donde se recorrió su trayectoria.

Luego de treinta años, encabezó un recital en el Teatro Luna Park, al cual concurrieron una gran cantidad de personas y tuvo, entre los cantantes invitados, a Valeria Lynch, Nicky Jones, Charly García, Chaqueño Palavecino, Raúl Lavié y Johnny Tedesco. En diciembre de 2010, actuará en el Festival de la Canción Popular, en Mar del Plata, junto a Chaqueño Palavecino, Marcela Morelo y Luciano Pereyra.

[editar]Palito Ortega en la cultura argentina

La película Pajarito Gómez (1965), de Rodolfo Kuhn, hizo una parodia al cantante y al resto de los integrantes del Club del Clan.2 También lo han asociado con el personaje Huesito Williams, en los espectáculos de Les Luthiers Luthierías (1984) y Viegésimo aniversario (1987).3 Lo mismo ha ocurrido con Manuel Darío, también de Les Luthiers, en el espectáculo Unen canto con humor (1999)4

Alejandro Dolina lo ha parodiado con su creación de Nardo Warren para el programa radial La venganza será terrible5 Por su parte, Peter Capusotto diseñó al ficticioBombita Rodríguez, también llamado "el Palito Ortega montonero", que fue recreado en su propio programa en 2008.6

Hernán López Echagüe publicó en 1991 el libro Palito Ortega: del ocaso artístico al éxito político, con ayuda de Ediciones Letra Buena. También han publicado libros sobre él Lambert S. Surhone y Sergio Crespo, quien lo presentó con el auspicio de Ediciones Nueva Ola.

[editar]Filmografía

  • Amor se dice cantando (1958)
  • Un viaje al más allá (1963)
  • El Club del Clan (1964)
  • Buenas noches, Buenos Aires (1964)
  • Fiebre de primavera (1965)
  • Convención de vagabundos (1965)
  • Mi primera novia (1966)
  • El Rey en Londres (1966)
  • ¿Quiere casarse conmigo? (1967)
  • Un muchacho como yo (1968)
  • Amor en el aire (1968)
  • Corazón contento (1969)
  • ¡Viva la vida! (1969)
  • Los muchachos de mi barrio (1970)
  • Pasión dominguera (1970)
  • Aquellos años locos (1970)
  • La familia hippie (1971)
  • Muchacho que vas cantando (1971)
  • La sonrisa de mamá (1972)
  • Me gusta esa chica (1973)
  • Yo tengo fe (1974)
  • No hay que aflojarle a la vida (1975)
  • Dos locos en el aire (1976)
  • Brigada en acción (1977)
  • El tío Disparate (1978)
  • Amigos para la aventura (1978)
  • Las locuras del profesor (1979)
  • Vivir con alegría (1979)
  • Millonarios a la fuerza (1979)
  • Locos por la música (1980)
  • ¡Qué linda es mi familia! (1980)
  • Cosa de locos (1981)
  • Un loco en acción (1983)

[editar]Discografia

  • Palito Ortega (Rca Victor 1962)
  • Palito siempre primero (Rca Victor 1963)
  • Palito (Rca Victor 1964)
  • Serie consagración (Rca Victor 1964)
  • Internacional (Rca Victor 1965)
  • Canta boleros en rio (Rca Victor 1965)
  • Fiebre de primavera (Rca Victor 1965)
  • En beverly hilton (Rca Victor 1966)
  • Mi primera novia (Rca Victor 1966)
  • En nashville (Rca Victor 196)
  • Lo mejor de palito ortega (Rca Victor 1967)
  • Quiere casarce conmigo? (Rca Victor 1967)
  • Un muchacho como yo (Rca Victor 1967)
  • El magnetismo de palito ortega (Rca Victor 1967)
  • Impacto (Rca Victor 1967)
  • El ángel de palito ortega (Rca Victor 1968)
  • El creador (Rca Victor 1968)
  • Viva la vida (Rca Victor 1969)
  • Muchacho de oro (Rca Victor 1969)
  • Palito como nunca (Rca Victor 1970)
  • Palito numero 21 (Rca Victor 1970)
  • Ramon Ortega "Palito" (Rca Victor 1971)
  • El fenomeno (Rca Victor 1971)
  • La sonrrisa de mamá (Rca Victor 1972 - Banda sonora)
  • El autentico (Rca Victor 1972)
  • Felicidades (Rca Victor 1972)
  • Yo tengo fé (Rca Victor 1973)
  • Un canto a la vida (Rca Victor 1974)
  • Canciones romanticas (Rca Victor 1975)
  • Por siempre palito (Rca Victor 1976)
  • 15 años de exito (Rca Victor 1977)
  • 15 años de exito Vol. 2 (Rca Victor 1977)
  • Me gusta ser como soy (Rca Victor 1978)
  • Autoretrato (Chango 1979)
  • Creo en dios (Chango 1980)
  • Ese hombre agradecido (Chango 1981)
  • Afectos (Chango 1983)
  • Cuando sueña una cancion (Chango 1984)
  • Ayer, hoy y siempre (Rca Victor 1986)
  • De fiesta (CBS 1989)
  • Yo soy latinoamericano (CBS 1986)
  • El sodero de mi vida (BMG/Ariola 2001 - Banda sonora)
  • Los roldan (Universal 2004)
  • Pasado y presente (Universal 2004)
  • Hoy (Universal 2006)
  • Prende y apaga la luz (EMI/Odeon 2010 - Sencillo)

[editar]Televisión

  • El Club del Clan (1962)
  • Sábados circulares (1967/1969)
  • Casino (1967-68/1970/1972)
  • El mundo del espectáculo (1969/1971-72/1979-81/1983-84)
  • Los especiales del Trece (1970-71)
  • Alta tensión (1973)
  • Premier 70 (1973-74)
  • El sodero de mi vida (2001)
  • Los Roldán (2004)
  • Gladiadores de Pompeya (2006)
  • Amor mío (2006)

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Hola Cati, ¡qué reencuentro! Ayer escuché un CD que encargué a Amazon cuando lo vi en mi maravilloso Google, de Negro Spirituals cantado por Marian Anderson, experiencia que había vivido en el Rex y que nunca olvidé. Miré en Internet y el recital había sido en ¡1950! Si fuera Cati, haría una crónica...
Y antes de despedirme: siempre aparece lo de sexagenaria... Mirá el diario de ayer o antes de ayer y María Fux, con más de 90, estrenó espectáculo...no importa que no esté ella en el escenario, dirigir ya es bailar...
Bicos
Miri

CATI COBAS dijo...

Ahora somos sexalescentes, Miri...Gracias por todo...Besos

Anónimo dijo...

Está bueno lo de sexalescentes, me gusta. La sexalescencia es un estado fantástico, septalescencia, octalescencia, nonalescencia...¿o siempre sexalescencia?
Bicos, definí bien el neologismo...
Miri

Anónimo dijo...

Además, como diría un vendedor de pastillas para adelgazar "Cati está más linda que nunca", no importa las décadas a las que se aproxime. Besos
Elvio

CATI COBAS dijo...

¡Gracias Elvio, es que me ves con buenos ojos...!